EL PARAJE COSTA PLASTILINA

(Cuento Infantil) Dedicado a Pocho Lepratti "El Angel de la Bicileta"

En el paraje "Costa de Plastilina", los duendes de la buena morada construyen casas que no tienen techos. Quienes llega a vivir allí, se recuestan sorprendidos las primeras noches, porque por primera vez pueden contar estrellas antes de dormirse.

Los habitantes mas antiguos, convocan los domingos por las tardes a la "Plaza de los Relatos", para que los lugareños escuchen famosas anécdotas, de las noches a cielo abierto.
Hay historias que hablan de los Reyes Magos y sus peripecias para llegar a destino, otras que cuentan los espectáculos de fuegos artificiales del Cometa Juan Carlos, y unas mas divertidas que narran las travesuras de Rubineto, el Mago del Planeta Las Galeras.

Las lluvias - cómplices desde hace años-, cada vez que deciden aparecer desvían su camino para no empapar los hogares. Las gotas mas rellenitas, son las encargadas de hacer señas para que las demás, tomen el atajo del Gran Chaparrón, que las terminará llevando a mimar los campos.

Un día de verano infinito, un tirano llegó al lugar proponiendo techar todas las casas del Paraje. Cuentan los duendes de la memoria infalible, que por la noche en la carroza de éste recién llegado, se apareció "Pocho el Angel de la Bicicleta", y lo convenció para que se fuera.